Imagina vivir en una comunidad sin reglas… ¿caos, verdad? Gente estacionándose donde quiere, música a todo volumen, mascotas sueltas, cuotas sin pagar y pasillos que parecen bodegas. Bueno, por eso existe el reglamento de condominio.
Si vives en un edificio en Santo Domingo o cualquier parte de la República Dominicana, y no sabes muy bien qué dice ese reglamento (o si existe), este post te va a interesar.
¿Qué es el reglamento de condominio?
Es un documento legal que establece cómo se vive y se convive en un condominio. Define los derechos y deberes de los propietarios, las normas de uso de áreas comunes, los métodos de votación en asambleas, y mucho más.
Y sí, según la Ley 5038 sobre condominios, es obligatorio tenerlo registrado para que el edificio esté bajo el régimen legal correcto.
¿Qué debe incluir un buen reglamento?
Aunque cada condominio puede personalizar sus normas, hay puntos clave que no pueden faltar:
🔹 Asignación de votos en las asambleas según la proporción de cada unidad.
🔹 Porcentaje de contribución de cada propietario a los gastos comunes.
🔹 Normas de convivencia: mascotas, ruido, horarios de uso de áreas sociales, etc.
🔹 Funciones y remuneración del administrador.
🔹 Destino de cada unidad: residencial, comercial, mixto.
🔹 Procedimientos para convocar asambleas, modificar el reglamento, y tomar decisiones importantes.
¿Y si el reglamento no se cumple?
Ahí es donde la cosa se complica. Pero por suerte, la Ley de Condominio 5038 respalda su cumplimiento legal. Si el reglamento está debidamente registrado, es oponible frente a terceros y puede incluso usarse en procesos judiciales si alguien insiste en hacer vida como si viviera solo en el edificio.
¿Quién puede modificar el reglamento?
Solo la asamblea de propietarios, bajo las condiciones que el mismo reglamento y la ley establecen. Algunas decisiones requieren mayoría simple, otras unanimidad. Nada se cambia a lo loco, ni por votación en grupo de WhatsApp.
¿Tu edificio no tiene reglamento?
🚨 ¡Alerta roja! Sin reglamento registrado, el edificio no está protegido por la Ley 5038. Eso significa que no hay base legal para tomar decisiones ni exigir pagos o cumplimiento de normas.
En MARO CMP, ayudamos a redactar, actualizar y registrar reglamentos de condominio 100% legales y adaptados a las necesidades del edificio.
En resumen
El reglamento de condominio no es un adorno legal. Es la base para que la comunidad funcione con orden, respeto y claridad.
Léelo. Respétalo. Y si no existe, ¡créalo ya!
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